domingo, 24 de septiembre de 2017


C
Un periodista holandés detenido por investigar

El oscuro negocio de la explotación del Coltán en el estado Bolívar

*** Es la primera y aparentemente “única” empresa mixta que está operando en el marco del Arco Minero del Orinoco, pero desde sus inicios presenta cuestionamientos
*** La poca transparencia del Arco Minero del Orinoco y de las empresas que lo pretenden ejecutar, hace que cualquier periodista o investigador del área sea objeto de presiones, amenazas e incluso detenciones ilegales al ahondar en el tema
*** El CIEV confía que el próximo gobernador Andrés Velásquez defienda la biodiversidad de Guayana y exija los correspondientes estudios de impacto ambiental a las empresas mixtas o transnacionales

(PRENSA CIEV) El pasado jueves 21 de septiembre fue detenido ilegalmente en la zona del Parguaza –municipio Cedeño del estado Bolívar-, el periodista holandés Bram Ebus por estar haciendo un trabajo de investigación sobre las implicaciones del Arco Minero del Orinoco.
Gracias a la presión de diversas ONG´s y la opinión pública, el periodista internacional fue liberado 24 horas más tarde.
Lo que deja bien claro esta detención ilegal de la Guardia Nacional Bolivariana,  es “quien investigue, pregunte mucho o visite el área de explotación del Coltán consultando a los pobladores indígenas locales sobre el funcionamiento de la empresa mixta que realiza la extracción VA PRESO”, cuestionó Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV).
Desde su concepción y anuncio, el Arco Minero del Orinoco ha traído gran controversia “y con justa razón”, por la magnitud del proyecto donde se entrega a empresas –en su mayoría extranjeras- el 22% del territorio nacional para su explotación y sin los debidos estudios de impacto ambiental.
En este sentido, la Corporación Faoz, C.A. es la primera empresa que firmó acuerdos con el gobierno venezolano para incursionar en el Arco Minero del Orinoco, el 7 de agosto de 2016 y se conformó en empresa mixta instalado un campamento en la franja de 111.843 kilómetros cuadrados al sur del río Orinoco, específicamente en el sector Parguaza del municipio Cedeño del estado Bolívar.
Según informaciones llegadas al CIEV, esta empresa no tiene experiencia acreditada en la exploración y explotación del llamado oro azul, y formalmente fue constituida el 29 de julio de 2016, apenas 9 días antes de que el gobierno venezolano le diera luz verde para la explotación minera del coltán, la casiterita, la ilmenita, el estaño, los circones, los diamantes y el oro que están en el subsuelo del Macizo Guayanés.
“La legislación venezolana establece que toda actividad minera debe estar sustentada en un previo estudio de impacto ambiental y sociocultural, lo cual no se ha cumplido en ninguno de los proyectos  del Arco Minero del Orinoco y en la actualidad la Corporación Faoz sigue trabajando sin realizar este requisito de ley”, señala el director general del CIEV, Alejandro Lanz.
Otro dato que llama la atención es que esta empresa mixta autorizada para explotar coltán y cualquier otro mineral que encuentre en  la  extensión de 10.201 hectáreas, no está inscrita en el Registro Nacional de Contratistas, a pesar de que es un requisito para hacer negocios con el Estado venezolano. 
Transcurridos nueve meses sin que trascendieran a la opinión pública las actividades desarrolladas por la empresa mixta Parguaza, el 9 de septiembre de 2017 el ministro de Desarrollo Minero Ecológico, Víctor Cano, anunció que dicho consorcio “cuenta con una tonelada de coltán almacenada para la exportación”.

“Su accionar los desarrolla sin ninguna supervisión por lo que no sabemos la magnitud de los pasivos ambientales que se están generando en esta zona que presenta una riqueza cultural invaluable con pictogramas y petroglifos que datan hasta de un millón de años antes de Cristo”, recalcó el titular del CIEV.
De igual forma, se pudo conocer que se ha formalizado la creación, asignación de áreas y autorización para iniciar operaciones de cuatro empresas mixtas: Parguaza, Oro Azul y Metales del Sur, en el municipio Cedeño; y Siembra Minera, en el municipio Sifontes.
“La poca transparencia en todos los procedimientos de Arco Minero del Orinoco y su lento pero real avance nos genera una gran preocupación (…) confiamos que el próximo gobernador Andrés Velásquez pueda ejercer la presión necesaria para evitar la destrucción de Guayana por estas empresas que no presentan ningún estudio de impacto ambiental ni de manejo o recuperación de áreas afectadas”, destaca Alejandro Lanz.

Para el ecologista, el candidato Velásquez es un político comprometido con el desarrollo sustentable de la región y con su llegada al Ejecutivo regional pondrá “orden” en la gobernación de Bolívar a fin que genere políticas públicas para  la protección y el beneficio de los guayaneses y no sólo para aplaudir o seguir sin cuestionar los dictámenes del gobierno nacional que condena a toda Guayana a la contaminación con el Arco Minero del Orinoco. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario