miércoles, 21 de septiembre de 2016

Arco Minero del Orinoco: El Socialismo Salvaje del Siglo XXI

El pasado miércoles, el gobierno inició la exploración en el Arco Minero del Orinoco en la región Guayana a pesar de las notorias preocupaciones de propios voceros oficialistas, exministros del tren ejecutivo del expresidente Chávez, instituciones universitarias, ONG´s de Derechos Humanos, Ambientalistas y organizaciones indígenas de base comunitaria, entre muchas otras instituciones públicas y privadas del país.
Y no es para menos –señala Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV)-, pues el proyecto gubernamental se basa en la entrega de 12 mil kilómetros cuadrados a 150 trasnacionales para la explotación de la minería a gran escala a cielo abierto en la región donde se encuentra el pulmón vegetal de la nación y los principales cuerpos de agua dulce que alimentan a la red de centrales hidroeléctricas que generan más del 70% de la energía a todo el país.
“Este mega proyecto se sustenta en una minería ecológica que no existe en el mundo, y ha sido entregada a trasnacionales que tampoco la practican en ninguna de sus concesiones ubicadas en distintos países del planeta (…) en todos los casos, las trasnacionales hacen una extracción a cielo abierto para lo cual deforestan grandes áreas de selva y remueven toda la capa vegetal, dejando totalmente “estéril” la tierra, sumado con la utilización de lagunas de oxidación con cianuro que han generado fugas, contaminando ríos enteros como los casos de Guyana, Argentina y Brasil, y sin ir muy lejos incluso aquí en Bolívar, con la laguna de oxidación de la concesión de Las Cristinas que contaminó el Cuyuní (…) ecosidios que ni el 100% del oro explotado ha alcanzado para pagar por la contaminación generada”, advierte Lanz.

Mientras en relación al atropello a las comunidades indígenas, el ecologista refirió que la mayoría de los pueblos originarios están en contra de este proyecto y por una sencilla y muy valedera razón: El Estado venezolano está en mora con los pueblos indígenas del país y en incumplimiento de la Constitución Bolivariana de Venezuela y la Ley Orgánica de los Pueblos y Comunidades Indígenas en cuanto a titularidad colectiva de los territorios y hábitats indígenas.
“El Ejecutivo nacional en vez de honrar las justas reivindicaciones a los pueblos indígenas, entrega parte de sus territorios a empresas trasnacionales (…) Un atropello a todas luces, donde un extraño socialismo del siglo XXI antepone el dinero al bienestar de los venezolanos originarios, donde prevalece lo económico a lo social, donde se entrega zonas de hábitats indígenas a trasnacionales del oro ¿qué socialismo tan raro?” se cuestiona Lanz al sentirse confundido, pues para el ecologista, estas acciones son propias del Capitalismo Salvaje, que tanto despotrica el oficialismo, pero que en la práctica, lo ejecuta sin contemplación.

Por todo ello, el titular del CIEV, Alejandro Lanz, hace un llamado a la rectificación, ahora que estamos a tiempo de conservar nuestros recursos más valiosos para dejar a las futuras generaciones, como lo son el agua, los bosques, la flora y fauna y los biomas en general “que contienen una riqueza biológica y son generadores de servicios ambientales -tan fundamentales como el oxígeno y el agua dulce-, para la vida en el planeta que ningún mineral precioso puede sustituir o comprar”, dijo finalmente. 

viernes, 9 de septiembre de 2016

A juicio de Alejandro Lanz, director del CIEV

El Arco Minero sentencia de muerte a la Región Guayana

***La mayor contradicción de la Ética socialista la cual plantea salvar el planeta, destruyendo los ecosistemas naturales más grandes de la nación
***A ciento cincuenta trasnacionales mineras se le ha entregado doce mil kilómetros del territorio nacional para la explotación de minerales metálicos y no metálicos
***Crece la preocupación por las afectaciones ambientales en las que se vería seriamente comprometida la generación de electricidad para todo el país, así como la contaminación de cuerpos de agua, perdida de bosques y biodiverdidad


El descontrol de la minería ilegal en la región Guayana desde hace más de un siglo, sumado a la ineficiencia del Estado venezolano en salvaguardar los recursos naturales más importantes de la nación, son antecedentes que generan una gran preocupación con el avance del proyecto denominado ARCO MINERO en el cual se han entregado a empresas privadas trasnacionales cerca de 12 mil kilómetros cuadrados para explotar minerales preciosos en los principales ecosistemas que generan el agua, electricidad y oxigeno para Venezuela y Suramérica.
Así lo refirió Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV), al ser consultado sobre este proyecto que pretende explotar las reservas de oro, diamantes, coltán, dolomita, caolín, hierro y bauxita del país; y para quien es un error tremendo, el autorizar la minería a gran escala a cielo abierto en Guayana, sacrificando los biomas y ecosistemas más importantes del país.
“El territorio nacional entregado a las empresas privadas trasnacionales incluyen selvas de Imataca, La Paragua y El Caura, que en conjunto abarcan más de ocho millones de hectáreas, además de las cuencas de los ríos Orinoco y Caroní que alimentan a la red de centrales hidroeléctricas que generan la electricidad para todo el país (…) adicional se está comprometiendo las fuentes vegetales y de agua dulce, que proveen mecanismos de regulación ambiental, oxígeno, entre otros servicios ambientales; por lo que los seis meses que especifica el Decreto en su Artículo 10 para planificar la nueva minería que habrá de ejecutarse, nos causa una gran preocupación por su inminente puesta en marcha”, señala el titular del CIEV:
Para el ecologista, los beneficiarios serán para las empresas transnacionales autorizadas para la explotación, mientras que los costos sociales y ambientales serán, como han sido con la actual minería ilegal, lo que le queda al país, a las comunidades locales y pueblos indígenas.  

VOCES DISIDENTES

Son muchas los voceros, especialistas y profesionales que han pedido al Ejecutivo Nacional que rectifique y paralice el Arco Minero. En Guayana importantes científicos e investigadores han alzado su voz de alerta ante este inevitable ecosidio como Nalúa Silva y Alexander Mansutti de la UNEG, el investigador Francisco Delascio Chitty, el clérigo René Brohm del Alto Caura, la destacada periodista ambientalista Evelyn Guzmán, entre muchos otros.
Para el expresidente de la Comisión de Ambiente del Senado y autor de las normas ambientales de la actual Constitución, doctor Alexander Luzardo, el Arco Minero atenta contra la visión estratégica del país porque va contra las últimas reservas de agua dulce y potable de Venezuela y afectaría significativamente la producción de la energía eléctrica del país.
En este sentido, Lanz refiere al exministro Víctor Álvarez, quien junto a otros altos exfuncionarios del tren ejecutivo del expresidente Chávez se han pronunciado en contra de la entrega del país y sus recursos a las trasnacionales, siendo considerada la medida neoliberal más grande que se haya realizado en la nación. Según Juan Carlos Sánchez, integrante del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC),
galardonado en el 2007 con el Premio Nobel de la Paz, señala que los daños ambientales que conllevaría el Decreto del Arco Minero sería la deforestación masiva necesaria para las excavaciones. Esto incidiría en el cambio climático, pues “La deforestación suprime el proceso de fotosíntesis que absorbe el CO2 de la atmósfera, y a la vez emite CO2 que es el principal gas de efecto invernadero.” Además, sin bosques que recubran la región, se eliminaría la evapotranspiración del bosque, fenómeno que consiste en el envío de grandes cantidades de vapor de agua a la atmósfera, lo cual aporta a las precipitaciones lluviosas. “En otras palabras, la deforestación tiende a aumentar los problemas de sequía,” dicta Sánchez.

Ana Elisa Osorio, ex ministra de ambiente (2000-2005), agrega que despojar el terreno de bosques “puede llevar a un proceso de desertificación el sur del país.” Después de todo, la capa vegetal de la zona no es recuperable. “Lo que va a dejar abajo es caliza. O sea, que ahí no va a crecer nada más. Por lo menos por siglos.”
En este sentido, el titular del CIEV advierte que tendremos a la “vuelta de la esquina” una crisis energética sin precedentes “no se trata solamente de excavación, de deforestación, de arrasar con la superficie de todo lo que es la capa vegetal del suelo, sino que esta tierra que se moviliza se lava o se lixivia con cianuro. Y el cianuro, como sabemos, es un elemento totalmente tóxico. Esas aguas lixiviadas, esa mezcla de agua con cianuro, teóricamente se van a colocar en unas lagunas que están impermeabilizadas para contenerlas. Pero ya han habido experiencias negativas en el país, como las filtraciones de la laguna de oxidación de la abandonada concesión de sector Cristalex que desde hace más de  diez años, mineros ilegales han socavado sus adyacencias, generando filtraciones de cianuro hacia el río Cuyuní (…) Esta contaminación ha traído como consecuencia que gran parte de las comunidades indígenas y poblaciones criollas como Las Claritas, sufran diarreas constantes, aparición  espontánea de laceraciones en la piel, enfermedades bacterianas como  resistentes a cualquier tipo de antibiótico. Asimismo, según denuncias de pobladores de El Callao, una de las lagunas de oxidación de CVG Minerven, también presenta filtraciones que desembocan en el río Yuruari, lo que complica aún más, la ya delicada situación de salud pública al sur del estado Bolívar (…) Entonces imagínate que al activarse el  Arco Minero haya una ruptura o una percolación de este líquido hacia el río Orinoco, hacia el río Caroní, hacia el río Cuchivero, hacia el río Caura, que son la reserva de agua de nuestro país. Setenta por ciento de nuestras reservas de agua están en el sur del Orinoco y podrían contaminarse irremediablemente con una afectación descomunal hacia la fauna acuática y a todos los pueblos y comunidades ribereñas que viven del río, pesca, cultivos, agricultura, etc etc”, recuerda Lanz, al tiempo de también llamar la atención sobre la sedimentación del caudal del río Caroní afectaría al país entero por el colapso de los embalses y de la generación eléctrica.

NO EXISTE LA MINERÍA ECOLÓGICA

“Ni en el sur, ni el norte ni el este ni el oeste de Venezuela, ni en otras parte de Latinoamérica o el mundo existe algún tipo de Minería Ecológica. Ni la minería ilegal, que a veces es semi-maquinizada y usa grandes cantidades de mercurio, ni mucho menos la industrial, que se encuentra en los marcos formales pero es geométricamente más devastadora que la ilegal en intensidad y extensión”, señala el director del CIEV, Alejandro Lanz.
Los métodos que se utilizan para obtener por ejemplo un gramo de oro son terribles en los términos de remoción de la capa vegetal, del uso de químicos como el cianuro o mercurio, de la contaminación de las aguas, de los impactos en comunidades.
“Entendemos que existe una agudísima crisis económica en el país, pero la obtención de liquidez comprometiendo la salud a la actual población de Guayana y las generaciones futuras con la implementación del Arco Minero sería la peor decisión que pudiera tomarse (…) Actualmente empresas petroleras en el área marítima en reclamación en Guyana han certificado yacimientos de petróleo liviano con un estimado de producción de unos 100 mil barriles diarios por los próximos diez años y el Estado venezolano se mantiene silente; estando aquí la liquidez que pudiera rescatar a la nación sin sacrificar los recursos naturales de Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro”, exhorta Alejandro Lanz.
Finalmente, el titular del CIEV hace un nuevo llamado al Ejecutivo nacional para que rectifique y no destruya la naturaleza guayanesa por el espejismo de bienestar momentáneo que pueden dar los minerales preciosos que al final se cuentas se agotaran y sólo dejarán a las poblaciones locales, una naturaleza muerta que conllevará al desplazamiento forzoso de las comunidades indígenas y criollas e imposibilitando el desarrollo del ecoturismo, como una verdadera alternativa para el desarrollo sustentable y del 5to Objetivo del Plan de la Patria: Salvar al Planeta, y para ello debemos de SALVAR A GUAYANA!!!

martes, 24 de mayo de 2016

Impactos ambientales del Arco Minero en Guayana

Impactos ambientales del Arco Minero en Guayana

***Ecologistas manifiestan su preocupación ante la afectación de 111 mil kilómetros cuadrados y la contaminación de los principales cuerpos de agua dulce del país 
***Preocupación por violación de zonas ABRAE y demás figuras de protección Ambiental 
***Comunidades indígenas también se pronuncian ante la situación 

Según señalara el presidente NicolásMaduro, el Arco Minero del Orinoco (Edo. Bolívar) tendrá una superficie de 111 mil kilómetros cuadrados duplicando así la Faja Petrolífera del Orinoco y cuenta con 7 mil toneladas de reservas de oro, cobre, diamante, coltán, hierro, bauxita y otros minerales de alto valor industrial.
Para el ministro de Petróleo y Minería, Eulogio Del Pino, la importancia de la activación del Motor Minero bajo la figura de los acuerdos que se firmaron con empresas nacionales e internacionales para la exploración y explotación e minerales metálicos y no metálicos, redundará en la diversificación de ingresos para la nación.
Asimismo Del Pino indicó que se explorará, certificará y explotará, preservando los recursos naturales y las culturas originarias, en cumplimiento de la Ley para el Desarrollo Productivo Minero 2016-2018 que reserva al Estado las actividades de exploración y explotación del oro y demás minerales estratégicos.
Sin embargo, son muchas las interrogantes, al igual que las voces de ecologistas, ONG´s, organizaciones y comunidades indígenas que advierten las repercusiones ambientales y socioculturales, la afectación de zonas protegidas ambientalmente por leyes nacionales, además de desplazamientos forzosos de asentamientos criollos e indígenas, por citas algunas. 

“Estamos hablando de una amplia zona de gran biodiversidad que abarca gran cantidad de bosques, selvas que están protegidas por decretos de reserva forestal como el caso de Imataca, de 3 millones 800 mil hectáreas, La Paragua y El Caura con 5 millones 134 mil hectáreas, monumentos naturales como el caso de Guanay decretados en 1991 y cuencas que están protegidas igualmente por leyes ambientales y convenios internacionales como la Cuenca del Caroní de 96 mil kilómetros cuadrados, que provee de las reservas de agua dulce más importantes del país y generadora de 60% de la energía hidroeléctrica que alimenta la represa del Guri y el complejo hidroeléctrico”, advierte Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV).
En este sentido, el ecologista destaca que, para la activación del Arco Minero, el Ejecutivo nacional, tendrá que violar importantes Decretos realizados por el Estado venezolano. 
“Aún más, si estamos en frente de una crisis energética, lo lógico es cuidar las cuencas del Caroní y Paragua, activar planes de reforestación, de eliminación de la minería en estos ríos que socava su cauce y manda lodo y sedimentos a Guri (…) y por el contrario, la respuesta no debería ser activar un Arco Minero que haga legal la explotación de minerales preciosos o no en estos vitales cuerpos de agua, de los cuales depende la generación de la electricidad de todos los venezolanos”, destaca Lanz. 
De allí que considere el ecologista al Motor Minero,como un sacrificio ecológico, que afectará a generaciones presentes y futuras. 
El titular del CIEV señaló que el Arco Minero iniciaría actividades incumpliendo las obligaciones constitucionales de realizar estudios de impacto ambiental y sociocultural en las actividades susceptibles de generar daños a los ecosistemas (artículo 129), así como consultar de manera previa, libre e informada a los pueblos originarios cuando se aprovechen recursos naturales en hábitats indígenas (artículo 120, Convenio 169 de la OIT).
“El modo de vida de los pueblos indígenas como Inga, MapoyoEñepáYekwana, Piapoco, KariñaArawakAkawako, entre otros, sería afectado por la actividad minera”, manifiesta Lanz, para quien y de igual forma, todo los pobladores del sur-oriente del país se verían afectados ante el incremento de contaminación del río Orinoco. 
Por otro lado, el decreto del Arco Minero del Orinoco, prohíbe y penaliza el ejercicio de los derechos a la reunión, manifestación pacífica y a la huelga, contrario a lo establecido en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; al convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo relativo a libertad sindical y a los artículos 53, 68 y 97 de la carta magna.
A pesar de la utilización de un lenguaje en el que abundan términos como “endógeno”, “sustentable” o “ecosocialismo” la política de expansión y el incremento de la minería ilegal en toda Guayana, traería grandes pasivos ambientales que se traducirán en desmejora de la calidad de vida de todos los pobladores de Amazonas, Bolívar, sur de Monagas y Delta Amacuro, por citar a los afectados más directos. 

“Comprendemos que hay una crisis económica, pero a pesar que el Ejecutivo nacional obtenga grandes ganancias por el Arco Minero y disminuya el “rentismopetrolero”, la salud y calidad de vida de todos los ecosistemas de la región Guayana se verán afectados en demasía, y con ellos, la calidad de vida de sus pobladores”, alecciona Lanz. 

LLAMADO DE ALERTA AL PRESIDENTE 
Las organizaciones indígenas del Amazonas se han comunicado con el CIEV en aras de hacer un llamado al presidente Madura tanto para la implementación de medidas en torno a la minería ilegal, como la preocupación por la entrega de concesiones para la extracción de minerales a trasnacionales en territorios indígenas. 
“Estamos profundamente preocupados debido a la creciente ACTIVIDAD MINERA ILEGAL (minería de oro) en varias zonas del Estado Amazonas, la cual afecta a numerosos pueblos y comunidades indígenas de la región. Durante los últimos años (2014 – 2015 – 2016) se ha observado un incremento de la minería ilegal en los cauces de numerosos ríos y zonas de selva alta, incluyendo la utilización de máquinas motobombas y embarcaciones con máquinas chupadoras, que utilizan métodos de dragado de las aguas delos ríos para la extracción de oro. El resultado de esta actividad ilegal ha sido una evidente destrucción ambiental en zonas como el Parque Nacional Yapacana, y los ríos Orinoco, Atabapo, Guainía, Sipapo - Guayapo, Alto CuaoOcamoManapiare - Ventuari, Parucito - Majagua, Parú, Asita, Siapa y otros; contaminación de las aguas por presencia de mercurio y otras sustancias tóxicas, así como la alteración del ecosistema fluvial en general, incluyendo la vida de numerosos peces que son fuente de alimento para las comunidades indígenas ribereñas y las capitales de Municipios. En las áreas afectadas se observan impactos ambientales como deforestación de grandes cantidades de selva tropical, desviación del curso de las aguas de ríos y caños, procesos de sedimentación y la afectación de numerosos ecosistemas amazónicos. De esta situación hay numerosos informes y numerosa documentación en la Defensoría del Pueblo y en la Fiscalía del Estado Amazonas, reseñan dirigentes indígenas pertenecientes a la Organización Regional de Pueblos Indígenas de Amazonas (ORPIA) y la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Amazonía Venezolana (COIAM).
Las organizaciones destacan que la actividad minera ilegal en todo el Estado Amazonas va acompañada de otras muchas ilegalidades, tales como el contrabando de productos nacionales, el tráfico de combustible, la prostitución, la delincuencia organizada, la entrada ilegal al territorio nacional de personas foráneas sobretodo de Colombia y Brasil, la presencia de grupos armados generadores de violencia y el tráfico de sustancias prohibidas por la ley. Todas estas actividades ilegales y en concreto la minería ilegal son hechos públicos ampliamente conocidos y difundidos por las comunidades y los medios de comunicación. 
Las organizaciones señalan que esta situación la han presentado en varias oportunidades en mesas de diálogo con la Vicepresidencia de la República, el Ministerio de la Defensa, CECODENA, el Ministerio para los Pueblos Indígenas, la Fiscalía General de la República, la Defensoría del Pueblo, y las Comisiones de Defensa y Pueblos Indígenas de la Asamblea Nacional. También les preocupa que mientras el problema aumenta y se detectan nuevos focos mineros ilegales en toda la región, en muchos casos las autoridades del Estado venezolano no han logrado controlar efectivamente el problema de la actividad minera ilegal que afecta a nuestros pueblos y comunidades y a la población en general.
Es importante resaltar que en el Estado Amazonas hay numerosas ÁREAS PROTEGIDAS, como los Parques Nacionales YAPACANA, Parima TapirapecóDuidaMarawaka, La Neblina; la Reserva de Biósfera Alto Orinoco Casiquiare; Zonas Protectoras, Reservas Forestales y Monumentos Naturales; y existe el Decreto Presidencial N° 269 del año 1989, que prohíbe la minería en todo el territorio de Amazonas.
“Debido a la alta fragilidad ecológica de los ecosistemas amazónicos, y que en su mayoría nuestros hábitats y tierras no han sido demarcados como reconoce el artículo 119 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela;  ratificamos que la vocación natural del Estado Amazonas deberá ser de preservación de recursos hídricos para el futuro del país, conservación de la diversidad biológica, y realización de actividades económicas sostenibles en la Amazonía (agroforestería, artesanía,  silvicultura, agricultura cónsona con el ambiente  -cacao orgánico-, pesca artesanal, ganadería bufalina no extensiva, apicultura y ecoturismo. Creemos que también se pueden promover fuentes alternativas de energía como la energía solar e hidroeléctrica a menor escala previo estudio de impacto ambiental.”
Las organizaciones indígenas insisten “Queremos hacer un llamado al Gobierno Nacional para que se tomen medidas efectivas que protejan la Amazonía venezolana de estos fuertes impactos ambientales y socioculturales. En este sentido, al expresar nuestra preocupación por la implementación del llamado Arco Minero del Orinoco, reconocemos como positivo que se haya excluido al Estado Amazonas de las actividades propias de esta política del Estado venezolano.”
Finalmente las organizaciones manifiestan la necesidad de sentarse con el Gobierno Nacional para dialogar sobre estos problemas, especialmente con la Presidencia de la República, a los efectos de que desde el Gobierno Nacional, se puedan coordinar acciones efectivas y medidas concretas que permitan controlar y erradicar la minería ilegal en Amazonas.

Una Planta de Tratamiento de Aguas Servidas para Ciudad Bolívar

Un sueño que se niega hacer realidad

Una Planta de Tratamiento de Aguas Servidas para Ciudad Bolívar

Por: Alejandro Lanz/Director General del CIEV

Ciudad Bolívar, desde la otrora Angostura del Orinoco, gobernantes van y vienen sin que alguno muestre la férrea voluntad política de “saldar cuentas” con un río Padre que nos alimenta, da trabajo y nos transporta.
Todos hablan del soberbio Orinoco, su majestuosidad y del privilegio de tenerlo frente a la capital histórica de Venezuela; sin embargo, se sigue descargando sin contemplación todas las aguas residuales y servidas de la ciudad.
Recordando los tiempos en que Rojas Suárez era gobernador, el entonces secretario de Infraestructura del Ejecutivo regional, ingeniero Héctor Millán, anunciaba que uno de los proyectos mas importantes de su administración sería precisamente la construcción de una planta de tratamiento de aguas servidas para Ciudad Bolívar: “tenemos que comenzar a construirla en 18 meses máximo de acuerdo a un convenio obligante con el Ministerio del Ambiente”, dijo para aquel entonces y aún se está en mora con toda la región.

En la actualidad se siguen descargando todas las aguas putrefactas al río Orinoco a través de seis puntos aguas abajo y otro punto que está aguas arriba de la Toma del Acueducto; con lo que la progresiva y peligrosa contaminación del río Padre sigue sin dolientes y con una población malagradecida que no ejerce ningún tipo de presión pública para con quien nos brinda tantas bondades. 
Décadas después el Socialismo del Siglo XXI prometió saldar esta deuda histórica de una Ciudad que, paradójicamente, quiere ser nombrada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, algo así como Paisaje Cultural de la Humanidad; pero que contamina su principal recurso natural del cual se basa para alcanzar este digno nombramiento.
No obstante el proyecto sigue estando “engavetado” en el Ministerio de Ecosocialismo desde hace más de diez años, sin que nadie lo haya podido desempolvar.
Para tener una idea de la problemática ambiental, podemos citar los muestreos realizados desde el 2005 al 2007 por la Red de Calidad de Agua de los ríos Orinoco y Caroní que opera CVG, en el cual se registraron “en forma recurrente” valores superiores a los establecidos para los usos más restrictivos como son el contacto humano total o parcial, siendo estos los referentes a los coliformes totales y fecales y las concentraciones de aceites y grasas, hierro total, aluminio total y fenoles. ¡Y este informe fue hace diez años atrás!
Otro estudio realizado por la Escuela de Ciencias de la Salud de la UDO, Sección Bioquímica en el año 2010 público los resultados de los estudios de la calidad del agua en los municipios Heres y Caroní, con conclusiones alarmantes.
Entre los resultados se muestran indicadores bacterianos en muestras del río Orinoco, tramo Ciudad Bolívar, y se evidencia que los niveles más elevados se encuentran en los sectores Desembocadura del Río San Rafael, La Cruz del Perdón y La Alameda, con valores de hasta 106 UFC/100 ml para bacterias heterótrofas totales; además, presencia de Escherichia coli y valores de enterococos de hasta dos diluciones decimales.
Mientras en el Balneario Marcella del municipio Heres mostró recuento de coliformes totales que exceden la norma oficial. Además, el Balneario La Candelaria (25%) mostró presencia de E. coli y enterococos, con valores de coliformes fecales dentro de los límites esperados.
Entre las conclusiones del estudio bacteriológico del agua del río Orinoco, tramo Ciudad Bolívar, indicó que el agua procedente de los sectores Desembocadura del Río San Rafael, Sector La Cruz del Perdón y Sector La Alameda no es apta para el contacto humano porque sus recuentos exceden los límites de la norma sanitaria vigente para este tipo de aguas. Mientras, en relación a los balnearios muestreados provenientes del río Orinoco (municipio Heres), el 50% son aptos para el contacto humano. En el Balneario La Candelaria hay que prestar especial atención a la presencia de contaminación fecal reciente en el agua (Escherichia coli), aun cuando sus valores de coliformes fecales están dentro del criterio.
Si tomamos en cuenta que este estudio data de hace seis años atrás; la situación actual de las aguas del Orinoco y afluentes, vuelve a poner en la palestra, la urgente construcción de un sistema interconectado de aguas servidas y cloacales direccionado a una Planta de Tratamiento para comenzar a minimizar comprobada contaminación del río Orinoco.
Estamos frente a un problema de salud pública de grandes dimensiones, un problema que puede ser evitado por el bien del pueblo bolivarense y de toda la región Guayana.
En este sentido, vale la pena mencionar que el 28 de julio de 2010 la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó en su resolución el acceso al agua potable y al saneamiento básico de la misma como “un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la vida y todos los derechos humanos”. La declaratoria resalta que “cada año fallecen, aproximadamente, 1.5 millones de niños menores de 5 años y se pierden 443 millones de días lectivos a consecuencia de enfermedades relacionadas con el agua”.
Esto se extiende no solo a la existencia de una planta de tratamiento de aguas servidas, sino el oportuno acceso al sistema de cloacas y el desecho apropiado de las aguas negras, en donde vuelve a comenzar el ciclo. Pero en Ciudad Bolívar las aguas servidas no solo contaminan el Orinoco sino que bañan múltiples calles de la urbe y mantienen en “jaque” al Jardín Botánico del Orinoco, donde –literalmente-, las colecciones botánicas como el Palmetun y Crasuletun se han perdido al quedar sumergidas, en reiteradas oportunidades, bajo las aguas cloacales provenientes de San Isidro. Un crimen ecológico que ha todas luces, demuestra la indiferencia de los gobernantes locales con la naturaleza y el medio ambiente.
Lamentablemente hoy, el Jardín Botánico del Orinoco, quien fue hace años, el segundo centro de estudio y de colecciones botánicas de la nación; en la actualidad sólo es un pequeño centro recreativo con un área de grama mantenida para que niños jueguen en los deteriorados parquecitos infantiles. La investigación botánica, los paseos guiados para que los estudiantes conocieran la diversidad de nuestra flora y todo el mundo científico que allí albergaba, se perdió.

El llamado es a todos los entes público, a las diversas instancias del poder Ejecutivo –municipal, estadal y nacional-, a encontrar la voluntad política para hacer la diferencia y “saldar” esta cuenta histórica con el pueblo de Guayana y del soberbio Orinoco que no aguanta más aguas cloacales como el aporte de una civilización a su cauce. 

miércoles, 10 de febrero de 2016

Los peligros de un avance descontrolado de la Frontera Agrícola

Avance de la Frontera Agropecuaria vs. Equilibrio Ambiental


La demanda, cada vez mayor de productos alimenticios genera grandes presiones en los lotes boscosos del estado Bolívar; una situación que despierta gran preocupación ante la expansión de la frontera agrícola en la entidad.
El necesario equilibrio entre las zonas de producción agrícola y pecuaria, y los bosques primarios y/o secundarios es de vital importancia para la naturaleza y los servicios ambientales que ellos nos prestan.
Si bien, el Agro nos da alimentos, los bosques nos brindan productos, también esenciales para la vida.  
“La sociedad humana obtiene muchos bienes esenciales de los ecosistemas naturales, desde los más elementales como la purificación del aire y del agua, la generación y preservación de los suelos y renovación de su fertilidad, hasta la polinización de los cultivos y la dispersión de semillas, entre tantos otros beneficios que, sin embargo están ampliamente subestimados por la sociedad”, señaló Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV).


Ejemplo de Corredores entre zonas de cultivo 
A su entender, han sido muchas las alteraciones iniciadas por el ser humano a los ecosistemas y en Venezuela y Bolívar,  muchas de estas intervenciones son  difíciles o casi imposibles de revertir en cualquier escala de tiempo relevante para la sociedad.
“Las deforestaciones masivas que se han realizado en los municipios Sucre, Piar, Pedro Chien y Gran Sabana; así como los embates de la minería ilegal que ha desertificado grandes zonas de toda Guayana, son un ejemplo claro de la perdida de ecosistemas, los cuales ya están llevando a las comunidades locales a sufrir de múltiples patologías asociadas a estas prácticas no sustentables (…) si adicionalmente y considerando que en todo el planeta, aproximadamente el 80% de la población humana depende de la medicina tradicional, y el 85% de la cual involucra el uso de extractos de plantas; nos estamos autocondenando”, estimó el ecologista.
En este sentido, aseveró que hay que comenzar por reconocer la acelerada pérdida de biodiversidad debido principalmente al cambio de uso de suelo, pues la deforestación y fragmentación de ecosistemas es actualmente la principal causa de la pérdida de biodiversidad, “y bajo esta premisa, se debe inventariar las zonas afectadas y las zonas ambientalmente estables, a fin de generar políticas públicas para garantizar que dichos espacios puedan mantenerse a salvo”.
La producción de alimentos es una necesidad para la sociedad, pero los estudios para la diversificación de los monocultivos que tienden a desgastar los suelos, se hace necesario para garantizar la misma productividad de alimentos a lo largo del tiempo, “y de ésta forma, reducir la presión sobre los lotes boscosos primarios y/o secundarios”, agregó el ecologista.
“En muchos países es reconocido el uso de los recursos naturales y en específico la biodiversidad como un eje de desarrollo, lo que da como resultado el crear líneas específicas de aprovechamiento sustentable de estos recursos. Por lo que se han creado diversos programas de desarrollo y de diversificación productiva en el ámbito de la política ambiental nacional”, indicó Lanz.
Por tal motivo solicitó al Ejecutivo regional, Ministerio del Poder Popular para la Agricultura y Tierras, y demás organizaciones gubernamentales que aperturen una mesa de estudio de la situación ambiental en el estado Bolívar ante el creciente y preocupante deterioro ambiental. “Y así generar concienciadamente los esquemas que permitan estimar y asignar valores objetivos a los  bienes y servicios que los ecosistemas nos prestan, pues sólo de esta forma las acciones de conservación y restauración de la naturaleza surtirán el efecto deseado”.
Asimismo, debe generarse la eficaz y oportuna asesoría a productores en función a la rotación de cultivos para minimizar el desgaste de los suelos con monocultivos.
“Para garantizar la producción actual como la futura, es necesario alcanzar un equilibrio ambiental entre las zonas destinadas a la agricultura y pastoreo, y las destinadas a la generación de servicios ambientales, es decir, lotes boscosos que se deben preservar sin alteración (…) Este equilibrio sumará para alcanzar una buena calidad de los suelos, lo que redundará en una mejor cosecha y a su vez, se mantendrán estables corredores biológicos, imprescindibles para una mejor calidad ambiental en las zonas productivas del estado Bolívar”, destacó Lanz.

Por consiguiente, el titular del CIEV manifiesta que la valoración de los Servicios Ambientales, “se nos presenta como opción viable para apoyar la conservación y el desarrollo sustentable (…) es de gran importancia promover áreas de bosque y sabanas en buen estado considerando principalmente aquellos bosques localizados en las partes altas de las montañas, ya que estos nos benefician de forma intangible para la obtención de fuentes de agua, diversidad biológica, belleza paisajística y recreacional, regulación de clima, producción de oxígeno y captura de carbono, entre otras bondades”.
Estos recursos no tienen un valor mercantilista perse, pero a su vez, la vida en el planeta no podría existir sin ellos, “por lo que desarrollar un plan ambientalmente sustentable para el Agro, es prioritario en materia de políticas públicas”, aseguró finalmente Alejandro Lanz.


Descubren en Venezuela nueva especie animal para el mundo 



La biodiversidad de la que tanto se habla abarca todas las especies con las que compartimos vida en este planeta. 
A pesar de tantos problemas ambientales, la naturaleza aun tiene la capacidad de sorprenderlos, al descubrir cada año nuevas especies en algún lugar del globo terráqueo, a sabiendas que es mucho más lo que nos queda por descubrir que lo que conocemos. 
Nuestro país está catalogado entre los diez países más biodiversos de mundo y hoy vuelve a hacer gala de esta atribución. 
El Centro de Investigaciones Científicas de Venezuela (CIEV) felicita a los científicos investigadores como Marcial Quiroga-Carmona, quien ha descrito una nueva especie de musaraña para Venezuela. Esta es la tercera nueva especie de musaraña que Quiroga-Carmona describe para nuestro país en 3 años; aunque hoy en día seguimos sin saber mucho de estos curiosos y característicos animalitos.
Las musarañas se encuentran entre los mamíferos más pequeños que existen, midiendo de 10 a 15cm de largo, incluyendo la cola. Se alimentan principalmente de insectos, tienen ojos y orejas reducidas, extremidades cortas, larga cola y rostro con una trompa que varía su tamaño dependiendo de la especie. Están dotadas de bigotes muy sensibles, y su característica más resaltante es la pigmentación roja de sus dientes.
Alejandro Lanz, director del CIEV concuerda con la organización ambientalista PROVITA al señalar que poco se conoce de las musarañas en Venezuela a pesar que se conocen más de 260 especies de ellas en el mundo. Sin embargo gracias a los trabajos de Quiroga-Carmona cada vez sabemos más sobre las musarañas en nuestro país. 
En la Sierra de Perijá, específicamente, se conocía la población de musarañas orejas pequeñas (Mammalia, Eulipotyphla, Soricidae, Cryptotis), las cuales se identificaron gracias a la forma del cráneo de ejemplares encontrados en Colombia. Sin embargo, con individuos colectados en la vertiente venezolana de esta serranía, y gracias a los estudios morfológicos realizados, se determinó que la especie que se encuentra en nuestro territorio presenta características morfológicas y morfométricas únicas, que la diferencian del resto de las especies conocidas en Colombia y Venezuela.
Esta valiosa investigación contó con fondos de la IEA, Iniciativa Especies Amenazadas, promovida por Provita a través del apoyo de Shell de Venezuela y otras instituciones.
Los trabajos de Quiroga-Carmona y sus colaboradores siguen demostrando la importancia y urgencia de continuar investigando la diversidad biológica de Venezuela, donde aún esperan muchas especies por ser descubiertas y nombradas para la ciencia.
Es por ello que el titular del CIEV hace hincapié en la necesaria conservación y uso sustentable de los diferentes ecosistemas y lugares naturales del país, los cuales son el hábitat de un sin fin de especies, descubiertas o no para la ciencia y la humanidad. 
"En Guayana, tierra de contrastes y mosaicos naturales, es impostergable un plan de ordenamiento y uso de sus ambientes naturales, los cuales albergan una verdadera riqueza biológica inmensamente más valiosa que cualquiera de las minerales preciosos o no que pudieran estar presente en su suelo o subsuelo (...) la necesidad de conservarlos es una tarea de todos quienes tenemos la dicha y privilegio de habitar esta tierra precámbrica repleta de maravillas geológicas y biológicas", señaló Alejandro Lanz del CIEV. 

Entregado por el director del CIEV Alejandro Lanz 

Galardonado el Parador TURIAMIGO por su contribución al ecoturismo y la promoción de la pluriculturidad de Bolívar 

El Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV) reconoció la importante labor  que lleva adelante el Parador Turistico TURIAMIGO en la atención y orientación al turista que arriba al estado Bolívar por vía terrestre. 
Así lo señaló el director general de esta organización ecologista Alejandro Lanz; quien destacó el gran esfuerzo que tanto Moy Rondón como Fritz Sánchez de la Coop Kerepacupai Merú han realizado para devolverle la "vida" a esta infraestructura que hoy por hoy es una verdadera Vitrina Cultural. 
"La diversidad de nuestros pueblos indígenas de Guayana, su arte y artesania la podemos apreciar y conocer más sobre ellos gracias a Moy y Fritz que atienden con esmero a visitantes y turistas; su preocupación por el ambiente y el ecoturismo, contribuyen a las buenas prácticas que todos deben tener al visitar los principales destinos de este hermoso estado (...) un reconocimiento mas que merecido para esta pareja de emprendedores y entusiastas de Guayana", resaltó el titular del CIEV. 
En este sentido, exaltó la gestión del gobernador Rangel Gómez en seguir brindando oportunidades a quienes siguen apostando al desarrollo sustentable de la entidad. 
Por su parte Moy Rondón agradeció el reconocimiento otorgado por el CIEV con el compromiso de seguir contribuyendo a la concienciación ambiental y turística para con los turistas y visitantes que arriben por vía terrestre a la entidad y aprovechó la oportunidad para agradecer igualmente el apoyo del gobernador Rangel Gómez y el secretario de Turismo, Ricardo Aquino "quienes nos dieron la oportunidad de poder desarrollar esta vitrina turística y cultural en la puerta de entrada por excelencia al estado Bolívar, como lo es el Parador TURIAMIGO ubicado al lado del peaje norte del Puente Angostura", dijo. 
En la infraestructura, el visitante podrá conocer Arte & Artesanía de distintos pueblos indígenas como el Pemón, Ye'kwana, Piaroa, Panare o Eñepa, Warao, Jiwi y Piapoco; además de arte popular de artesanos bolivarenses, dulces típicos y los reconocidos "Lúdicos Ecologicos", rompecabezas de fauna silvestre venezolana elaborados en madera de pino y coloreados con tintes ecológicos y no tóxicos. 
"Es grato poder orientar a visitantes y turistas que vienen a Ciudad Bolívar, Gran Sabana y Canaima entre otros tantos destinos que tiene nuestro estado e igualmente sobre los atractivos turisticos de Soledad (Anzoátegui) con quien estamos estrechamente ligados por el río Padre, río Orinoco", explicó Rondón. 
Según informaciones dadas al CIEV

Preocupante contrabando de combustible hacia Trinidad

***De la isla caribeña la gasolina es revendida de forma legal a las transnacionales de Guyana que están explotando los recursos naturales del Esequibo venezolano

Con los controles impuestos en la frontera colombo-venezolana en varios estados del país, se ha intensificado el contrabando de combustible hacia Trinidad desde las regiones de Sucre y Delta Amacuro, de forma alarmante.
Según informaciones dadas al Centro de Investigaciones Ecológicas de Venezuela (CIEV), el combustible es trasladado a altamar por embarcaciones modificadas para almacenar miles de litros de combustible y desde allí se hace el intercambio. Al entrar a Trinidad, el combustible es vendido a las transnacionales canadienses, chinas y norteamericanas que operan ilegalmente en el territorio en reclamación –pero con la anuencia del gobierno guyanés.
“En este sentido, las mafias de la isla caribeña se están haciendo multimillonarias con la gasolina venezolana, realizado “el lavado de combustible” por así decirlo (…) asimismo están garantizando a las transnacionales un suministro de combustible para que sigan explotando el Esequibo, principalmente a la industria maderera y del oro”, señaló Alejandro Lanz, director general del CIEV.
Por tal razón, Lanz hace un llamado a la Armada venezolana para que establezca nuevos operativos de control y vigilancia en la región costera del oriente del país en aras de identificar y paralizar el contrabando de combustible por esta zona, el cual se ha incrementado de forma alarmante.
“Son miles y miles de litros de gasolina que se están desviando hacia Trinidad; quien a su vez lo revende a precio internacional a las grandes corporaciones que se encuentran en el Esequibo (…) es una aberración que mafias venezolanas apátridas estén garantizando un suministro de combustible que mantenga operativas a estas empresas que deforestan y extraen los minerales preciosos que son de Venezuela”, resaltó el titular del CIEV.
Consciente que el diferendo del Esequibo es un tema complejo y delicado, Lanz puntualizó que ambas partes deben respetar la no explotación de los recursos naturales que ella contiene, hasta cuando se llegue a un acuerdo de delimitación de fronteras entre ambas naciones, de forma consensuada.
“Es impresionante, la falta de buena voluntad del gobierno guyanés, el cual da su anuencia a la explotación del oro en el Esequibo y como un ejemplo palpable y cercano podemos citar cómo se está extrayendo oro a veinte kilómetros aguas arriba de la población de San Martín de Turumbán; así como la activación de una mina Aurora en la región 7 ubicada en el área del Esequibo, explotada por la compañía de origen canadiense Guyana Goldfields, la cual estima extraer 6 toneladas de oro y tiene empleados a 800 trabajadores para ello”, señaló el ecologista.
Para Lanz, la presencia de la Fuerza Armada Bolivariana en el Esequibo debe activarse para resguardar los recursos naturales que poseen.
“Se requiera a su vez, ir poblando el Esequibo venezolano para evitar los abusos que se comenten desde Guyana (…) la presencia de la FANB es importante en la vigilancia y control, sin embargo el poblar el territorio también para garantizar una mayor soberanía sobre nuestro territorio”, apuntó finalmente Alejandro Lanz.

Alerta Alejandro Lanz 

Preocupación por perdida del Patrimonio en Ciudad Bolívar 

Causa gran preocupación como el Patrimonio Cultural y Arquitectónico de nuestra Ciudad Bolívar se sigue perdiendo de forma constante e irreversible. 
Así lo manifestó Alejandro Lanz, director del Centro de Investigaciones de Venezuela (CIEV), quien en un breve recorrido por el Paseo Orinoco constató que desapareció uno de los bustos de la colección estatutaria del Paseo Orinoco, así como el Santo de la fachada material del Museo del Correo del Orinoco. 
"Nos preocupa el progresivo deterioro y la desaparición de piezas patrimoniales en la ciudad y la aparente apatía de quienes tienen la responsabilidad de velar por el patrimonio Cultural e Histórico de la otrora Angostura", señaló el titular del CIEV. 
En este sentido, Lanz hizo un llamado en aras de generar efectivas políticas públicas que garanticen que no se sigan violando las Ordenanzas Patrimoniales y el desconocimiento el Articulo 99 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y el Articulo 2 de la “Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural Venezolano. 
"Ambos Artículos otorgan el Derecho y Obligan a la protección, preservación, conservación y restauración del Patrimonio Cultural, dado que los bienes representativos de la cultura material Venezolana son inalienables, imprescriptibles e inembargables", apuntó el ecologista. 
En virtud de ello, se requiere implementar campañas para el conocimiento de la Ley que establece penas y sanciones a quienes causen daños a bienes materiales históricos "sin embargo hasta la presente fecha no se ha producido un hecho referencial notorio, donde, se les dé un alto a los infractores, destructores, demoledores y saqueadores de las Edificaciones Históricas Culturales Arquitectónicas (muchas veces bajo la mirada indiferente de nuestros gobernantes), acotó. 
En tal sentido recordó que no son pocos los ejemplos de la progresiva pérdida patrimonial en Ciudad Bolívar; encontramos la Casa Antillana la cual estaba ubicada en la esquina de la calle Zea con Piar, en esta misma ubicación pero diagonal a ella estaba la Casa el Sordo el cual un domingo de abril a las diez de la mañana sin ningún remordimiento y apego a las joyas patrimoniales fue derrumbada; mientras que la intervención a la Piedra del Medio aún sigue presente "no entiendo porque no han quitado esa base de concreto que viola el patrimonio natural de nuestra Angostura del Orinoco", reflexionó el titular del CIEV. 
Ante la realidad palpable en el Casco Histórico, Paseo Orinoco y espacios naturales declarado patrimonio como la Piedra del Medio, Alejandro Lanz hace un llamado al alcalde Hernandez, al Instituto de Patrimonio Cultural de la gobernación de Bolívar a fin de activar un plan de emergencia de rescate y preservación de los bienes e inmuebles patrimoniales que aún tiene en pie la ciudad. 
Asimismo, recuperar los objetos que aún están presentes en nuestro Paseo Orinoco y Casco Histórico.
Finalmente Lanz hizo referencia al último Decreto 1.424, el cual amplió la Protección del Casco Histórico de Ciudad Bolívar, de fecha 12 de enero de 1991, publicado en Gaceta Oficial 276.818 de fecha 14-01-1991, teniendo un Articulo Único y declarando a Ciudad Bolívar como Monumento Histórico Nacional, donde se extendió el Cuadrilátero Histórico hasta la calle Anzoátegui.